Cuatro jóvenes ganadores del premio de cine juvenil Andalucine

Abderrahim Belghalia, Mohamed El Azzouzi, Abdelouadoud Abboute, Mohamed Lamine, son los ganadores del premio de cine juvenil Andalucine galardonado por Naciones Unidas.

Abderrahim Belghalia, Mohamed El Azzouzi, Abdelouadoud Abboute y Mohamed Lamine Kobele Keita salieron de África en búsqueda de oportunidades al otro lado del Estrecho.

Cuando llegaron en patera a Andalucía eran menores de edad y se integraron en el sistema de acogida de esta comunidad autónoma.

Cuando cumplieron 18 años convivieron los cuatro en un piso tutelado. Este piso, gestionado por la Asociación Engloba, es uno de los recursos que hay en Andalucía para dar continuidad a la protección de los menores no acompañados, una vez cumplen la mayoría de edad. Estos programas de protección cuentan también con educadores que acompañan a los jóvenes durante su formación, les ayudan a buscar un trabajo y les apoyan en los trámites necesarios para legalizar su situación administrativa

Estos cuatro jóvenes son los protagonistas del corto “las dos caras de la moneda”, ganador del premio de cine juvenil Andalucine de la Fundación CEAR.  En este corto, que ha sido también galardonado por las Naciones Unidas, transmiten a la sociedad española, de una manera mágica, el porqué de ese viaje y qué buscan en España.

De esta forma, quieren responder a los estereotipos, la criminalización, y los bulos y noticias falsas que dañan a los menores no acompañados en España.

En este conmovedor cortometraje expresan que han dejado atrás a su familia, sus amigos y su mundo para estudiar, trabajar e integrarse.

Abderrahim, cuando llegó a España, no sabía leer ni escribir. “En Marruecos no tenía estudios, ni trabajo, ni ingresos. No tenía nada”.

Decidió embarcarse, junto a un amigo, en una patera que le llevó a Algeciras“Solo pensaba en estudiar y encontrar un trabajo”

En Motril, tras cumplir 18 años, tuvo la suerte de conseguir una plaza en un programa para extutelados, consiguiendo así un contrato como mecánico tras hacer prácticas en una empresa. Hoy tiene los papeles en regla, alquila una vivienda y trabaja con contrato en la agricultura en Motril.

Abdelouadoud lo expresa con mucha claridad: “No venimos a delinquir, venimos a trabajar”. Abdelouadoud encontró trabajo en un restaurante, pero no ha interrumpido su formación. Mohamed Lamine llegó de Guinea hace dos años, también en patera. Llegó con una enfermedad en un pie y con la esperanza de curarse en España. Por este motivo aún no ha podido comenzar a trabajar, que es su principal motivación “Me gustaría trabajar de recepcionista en un hotel o de lo que sea”. En este momento está haciendo un curso de formación de atención socio sanitaria gestionado por la Diputación de Granada. Mohamed El Azzouzi consiguió un contrato en prácticas en un catering para formarse en restauración mientras estaba tutelado en el Centro de Menores. Hoy trabaja en una empresa de serigrafía, gracias a la cual ha conseguido permiso de residencia y de trabajo. Mohamed lo tiene claro, “aquí hemos venido a trabajar”.

Realización del corto:

Datos de realizadores del corto y sus contactos en redes sociales:

Realización, dirección y producción:

Jorge Orellana Lorenzo Instagram : jorge_orellanalorenzo

Pedro Marcos Carrillo Pastor: Instagram: peyx_cp

Inma Diéguez: Instagram: inma_olym

MÚSICA CREADA Y COMPUESTA PARA EL CORTROMETRAJE POR: Joaquín Abel Agüera Gómez

OTROS FIGURANTES DEL CORTOMETRAJE:

– Elena Cuberos García

– Carmen Pastor Ruiz

El corto es una iniciativa del Programa “Lanzadera Granada” ejecutado por la Asociación Engloba.

Guión del corto:

Yo vine a esto.

Desde pequeños nos enseñan que la dualidad es parte de nuestra existencia.

Nos dicen que todo tiene dos polos opuestos

El amor y el odio

El bien y el mal

El cielo y la tierra

La luz y la sombra

El Ying y el Yang

Las dos caras de la moneda

Pero un día leí un relato que quiero contarte:

“Había una vez un campesino que gordo y feo que se Había enamorado (¿Cómo no?) de una princesa hermosa y rubia.

Un día, la princesa -Vaya usted a saber por qué- dio un beso al feo y gordo campesino.

Y mágicamente, éste se transformó en un esbelto y apuesto príncipe

(por lo menos, así se sentía él)”

Hay quien piensa

que los jóvenes extutelados no hemos venido a España a intregrarnos

Pero no lo dejé todo para hacer eso:

–          La sonrisa de mi madre

–          La mirada de mi padre

–          Mis amigos y mis calles

–          Los olores y sabores

–          Jugándome la vida por un futuro mejor

–          Cruzando un mar o escondido en un camión